sábado, 20 de agosto de 2011

JMJ 2011 y la gestion de la emocion positiva

De regreso de las vacaciones, me he encontrado en mi primera semana de trabajo con la celebración de la JMJ en Madrid.

Debo decir, que un principio no despertó mucho interés en mi, dado que no soy muy practicante y con todo lo que está sucediendo en España, no centré mi atención en este evento.

He de reconocer, que tras esta semana que hemos vivido en Madrid me llevo un balance muy positivo de la visita del Papa a España, y sobre todo, de la lección de convivencia y optimismo de los cientos de miles de jóvenes que han plagado las calles de la capital.

Y digo balance positivo porque llevamos unos cuantos años viviendo entre emociones negativas, y frustraciones constantes. La sociedad española, y entre ellos me encuentro yo mismo, hemos venido sufriendo impactos negativos desde hace muchos años y la desesperanza y la incertidumbre se han apoderado de muchas personas, de muchos de nosotros, de muchas de nuestras empresas.

Siempre me habeis escuchado decir que tenemos que ser más positivos, que debemos afrontar con ilusión el futuro, porque debemos ganar nuestro presente. Pero en el fondo de mi corazón sabía que faltaba algo, que se necesitaba algo más para que ese discurso que todos o la mayor parte de mis compañeros compartían, tuviera un reflejo real en nuestros comportamientos del dia a dia.

Debo decir, que con las experiencias que he cosechado en esta semana intensa en Madrid, la respuesta la tienen los cientos de miles de jóvenes de tantas y tantas nacionalidades, que han dado un ejemplo de positivismo y esperanza hacia el futuro del que la sociedad española debe impregnarse hasta la médula.

Ni los discursos buenistas, ni los motivadores sin fundamento, podrán conseguir lo que una motivación por la vida puede hacer.

Debemos vivir. Y para ello debemos mirarnos en el espejo de estos jovenes y concluir que no podemos desaprovechar el tiempo, que tenemos la obligacion de dar todo lo que tengamos dentro para que entre todos podamos sacar el pais hacia delante. Nadie va a ayudarnos. Debemos ayudarnos a nosotros mismos.

La esperanza debe guiar nuestros pasos en el mundo empresarial y nuestra función social, dentro de nuestras empresas y organizaciones, debe primar sobre todo lo demás.

Una motivación así, consigue derribar montañas, construir imperios, contagiar de felicidad y mejorar el mundo. Vamos a empezar a trabajar con ilusión, a darnos cuenta que no solo trabajamos por dinero, sino que trabajamos por un bien social, personal, y que formamos parte de la vida, construimos la vida, construimos nuestro pais.

No debemos ser indiferentes. Debemos tomar partido, serio y responsable, construyendo nuestras organizaciones desde un punto de vista sistemico, sostenible entre lo economico y lo social. Ahora es cuando la RSC debe tomar protagonismo, ahora es cuando las empresas deben velar por sus empleados, ahora es cuando los empleados deben velar por sus empresas.

Ahora es cuando, nosotros, las personas que trabajamos en la funcion de recursos humanos, debemos tomar el mando, dar un golpe en la mesa y empezar a humanizar las organizaciones.

Somos la pieza clave y necesaria para que nuestras empresas no se hundan en esta crisis de esperanza e ilusión. Debemos devolver la ilusión, debemos conseguir que las personas que forman nuestras organizacíones, CREAN en ellas, luchen por ellas y se ayuden por ellas.

Una empresa, un pais, una sociedad.

Tomemos el protagonismo desde nuestra responsabilidad individual. Nadie sino nosotros tiene la capacidad de sacar esto hacia delante.

Ánimo a tod@s porque la esperanza y la ilusión por vivir es lo último que debemos perder.

Saludos.

Jesus Garcia Mingorance

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